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AP

Miles de dolientes acompañaron los ataúdes de cinco integrantes del grupo armado libanés Hezbollah, cuyo funeral se celebró el domingo en el sur de Beirut después de que murieron en combates en Idlib, en el noroeste de la vecina Siria.

Los combatientes estaban entre al menos ocho miembros de Hezbollah que murieron el viernes en ataques de Turquía en medio de feroces combates entre las fuerzas del presidente sirio Bashar Assad y las tropas turcas y milicianos aliados. Se trata del mayor número de bajas para el grupo armado libanés en Siria en años.

Hezbollah envió miles de combatientes a pelear a Siria en 2012, un año después de que comenzara el conflicto. Han estado ayudando a las fuerzas de Assad a ganar importantes batallas contra los rebeldes, y junto con apoyo aéreo ruso, han cambiado el rumbo de la guerra. En los últimos dos años, a medida que la situación de seguridad se estabilizó en muchas áreas, Hezbollah retiró gran parte de sus fuerzas, dejando solo unos pocos cientos de combatientes en varias áreas del país devastado por la guerra.

El funeral se celebró en el distrito sur de Behout de Ghobeiri. En medio de cánticos de “Alá Akbar”, que significa “Dios es grande”, se escucharon también disparos al aire, una señal tradicional de duelo. Al menos cinco personas fueron vistas en camillas tras desmayarse, aparentemente abrumadas por la emoción.

No estaba claro cuántos combatientes de Hezbollah murieron exactamente en los ataques del viernes en Idlib.

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